Las imágenes aéreas proporcionadas por drones facilitan una evaluación precisa del estado de las estructuras sujetas a controles de mantenimiento. Los ingenieros utilizan estas imágenes para definir y planificar los cronogramas de proyectos.
La ventaja de los drones radica en su capacidad para acceder fácilmente a lugares peligrosos o de difícil acceso, capturando imágenes detalladas y evaluando características complejas de las estructuras. Los drones ofrecen una cobertura más amplia al tomar fotografías, grabar videos y realizar mediciones.
Además, pueden capturar múltiples repeticiones de la misma imagen en la misma ubicación, facilitando la comparación antes y después de las tareas de mantenimiento o reparación. Los drones modernos pueden integrarse con una variedad de sensores, como detectores de fugas de gas mediante imágenes infrarrojas, para recopilar datos más completos en menos tiempo. Utilizando tecnologías de comunicación como Wi-Fi, datos móviles y Bluetooth, estos dispositivos transmiten datos en tiempo real, permitiendo que las partes interesadas visualicen las imágenes instantáneamente.